Es importante para quién se motiva con su propio cultivo de marihuana saber y entender de plagas asociadas a esta maravillosa planta, que no solo es atractiva para nosotros los humanos si no que también lo es para diversos tipos de insectos, bacterias y otros agentes externos que al interactuar con nuestro jardín pueden perjudicar su correcto desarrollo. Es por eso que hoy en el Blog de Como Piojo Grow queremos hacer un repaso de las plagas más comunes en las plantas de cannabis. Para que así no haya Como Piojer que no pueda ser precavido ni combativo con estos “amigos” no deseados que muchas veces son inevitables.

Orugas

Las orugas son un tipo de insecto que se caracteriza por ser gran comedor de follaje, son muy rápidas al momento de devorar las plantas, y es por eso que apenas se nota su presencia la respuesta debe ser lo más instantánea posible.

Puedes notar la presencia de las orugas por los huevos pequeños de color amarillo o semi traslúcidos que dejan en las hojas, asi como diminutos restos de excremento de color negro. Hay casos en los que incluso se encuentran cogollos podridos ya que la oruga es capaz de penetrar el interior de la flor.
Una vez que detectas las orugas debes retirarlas con las manos, que es lo más eficaz. Junto con esto lo ideal es combinar el tratamiento con insecticida fabricado de la infusión de pimentón y ajo.

Araña Roja

La araña roja es un insecto diminuto que tienda a parecer cuando la humedad es muy elevada en los cultivos de interior. Chupa la savia de las hojas y no necesita tampoco de mucho tiempo para acabar con tus nenas. Si se juntan muchas en una noche pueden fácilmente mordisquear y acabar con toda una plantación.

La araña roja se detecta por las manchas blancas que deja al succionar la savia de tu planta. También por motas amarillas o negras en ambas caras de la hoja. Hay veces en las que no se perciben y se confunden los sintomas con la carencia de nutrientes. Por eso hay que mirar con detención para detectar a estos minusculos insectos de color café y rojo semi anaranjado. Lo mejor es observar con lupa y prestar atención a una pseudo tela que dejan sobre las hojas.

Para combatir la araña roja lo más importante es mantener el espacio de cultivo limpio y ventilado, que la humedad del ambiente no supere el 65% y la temperatura los 27 grados celsius. Para erradicarlas de las hojas se deben limpiar estas con una mezcla de alcohol y agua, y aplicarla con un atomizador directamente sobre y tras las hojas. El aceite de Neem y el jabón potásico, populares en el mercado de growshop, son muy eficaces en el combate contra esta plaga.

Trip

El trip es una plaga muy pero muy tediosa. Es un insecto diminuto que se mueve muy rápido por lo que hay que actuar contra el de manera pronta para disminuir el daño que puede ocasionar. De manera preventiva se puede pulverizar la planta con aceite de Neem o Jabón Potásico.
Puedes notar su presencia al encontrar marcas plateadas en la superficie de las hojas. También al notar hojas quebradizas, ya que el trip chupa la clorofila de tus plantas.
La lucha contra el trip se lleva a cambo con Jabón Potásico o Aceite de Neem siempre y cuando la floración aún no haya comenzado. Si la floración ya comenzó debes atacar los trips con productos biologicos que contengan el hongo ‘Verticillium lecanii’.

Mosca Blanca


La mosca blanca es otra plaga que chupa la savia de las hojas para y hasta debilitar las plantas. Es un insecto muy común y menos mal, no es de los más letales. Un tip interesante es que se puede prevenir su presencia plantando albahaca cerca.
El primer síntoma de su presencia es muy claro ya que es un insecto que se ve volar al agitar las plantas. Las hojas amarillentas son otro síntoma de su presencia y que ocasionan al chupar la savia de las hojas.

Una vez que descubres la mosca blanca la manera más efectiva es pulverizarla con Aceite de Neem o Jabón potásico. Que como estamos leyendo, son 2 productos muy efectivos para el combate de las plagas que en general y mayor cantidad atacan a las plantas de marihuana.

 

Así terminamos la primera parte de este post dedicado a las no deseadas pero prácticamente inevitables plagas que pueden atacar a nuestras plantas de cannabis. Sigue atent@ a nuestra web que la parte 2 se viene en cualquier momento.

Y recuerden! hacerla bonita es hacerla Como Piojo.
Gracias por leer 🙂

Tío Como Piojo.

No existe duda de que las autoflorecientes son variedades muy convenientes para todo cultivador urbano. Estás pequeñas pero poderosas genéticas ganan y ganan adeptos con el pasar del tiempo y las temporadas de cultivo. Si bien hace no mucho tiempo eran muchos los jardineros que tenían sus dudas con respecto a la calidad de las flores obtenidas de una planta autofloreciente, hoy por hoy se puede decir que es muy díficil diferenciar a ciegas en una cata un cogollo de una autofloreciente y otro de una planta feminizada.
Las genéticas autoflorecientes tienen la cualidad de no ser fotodependientes, es decir, el inicio de su floración no tiene relación con el ciclo de luz. Todas manejan más o menos 3 semanas de periodo vegetativo e independiente de la cantidad de horas lumínicas comienzan a florecer. Son plantas de pequeña estatura pero de bondadosas flores que tienen la particularidad de ofrecer cogollos en lapsos que no superan los 3 meses.
Al ser pequeñas son plantas fáciles de disimular y al ser rápidas satisfacen una enorme necesidad del Como Piojer promedio: inmediatez. Con jardines de autoflorecientes en 9 semanas vas de semilla a cosecha. ¿Maravilloso no?
Hoy, el buen Tío Piojo quiere repasar con y para ustedes unos pequeños consejos que te ayudarán en tu cultivo de estas variedades.

1.- Elegir un buen sustrato
Si bien el sustrato es determinante para todo tipo de plantas en el caso de las autoflorecientes necesitaremos uno completo que ayude a la planta en todos los procesos sin requerir demasiado transplante ni asimilación lenta de nutrientes. Con las “auto” el tiempo premia y es clave, por eso un buen sustrato desde el inicio pavimentará el camino al éxito.

2.- Macetas grandes
Lo ideal es que las autoflorecientes vayan de inmediato a la maceta en la que harán el ciclo completo. Como ya venimos diciendo el tiempo premia y el estrés de un transplante puede generar retrasos innecesarios que terminan en plantas más chicas de lo que queremos. El mejor tamaño se logra eligiendo una maceta grande para comenzar y no trasplantar durante el ciclo de la planta.

3.- Temperatura radicular
El ambiente radicular de tus autoflorecientes no debe ser ni muy caliente ni muy frío. Un correcto manejo de las temperaturas beneficiara los procesos de tus plantas y disminuirá todo tipo de estrés por temperatura. Elige bien tus horas de riego y la temperatura del agua, además, procura que el espacio de cultiva no sea extremo en cuanto a temperaturas altas o bajas.

4.- Ciclo constante de luz
Tus autoflorecientes necesitarán ciclos de luz lo mas estables, largos y continuos posibles. Mayor y mejor luz se traduce si o si en plantas más grandes, fuertes y poderosas. Para indoor es recomendable no bajar de 18 horas de luz, y recuerda, el ciclo no necesita ser cambiado para que tu planta comience y complete su floración.

5.- Fertilización a tiempo
Dale a tus autoflorecientes una fertilización completa y no separes por ciclos. Tu autofloreciente trabaja raíces, hojas y flores prácticamente que al mismo tiempo. Elige fertilizantes completos ideales para autoflorecientes que en el mercado hoy por hoy abundan.

Ahora es solo cosa de buscar en nuestra web la autofloreciente que se adapte a lo que necesitas y comenzar a aplicar estos breves pero hermosos consejos para en 3 meses tener flores de calidad superior.
Y recuerden! hacerla bonita es hacerla Como Piojo.
Gracias por leer 🙂

Tío Como Piojo.